La respuesta es sencilla: ¡porque es cómodo!
Y no lo decimos en broma: la mayoría de nuestros viajes implican cambios de alojamiento y traslados en monovolumen o coche de alquiler. En este caso, resulta mucho más cómodo colocar una mochila de viaje en el maletero junto con las mochilas de los demás WeRoaders. Además, comprobarás que en ciudades abarrotadas, metro, carreteras de tierra o nevadas, ¡no tener que arrastrar una valija con rueditas es una salvación! La guinda del pastel: ¡tener las dos manos libres mientras viajas por el aeropuerto y la ciudad es muuucho más cómodo!
Te sugerimos que consideres una solución que combine una mochila de 50/60L para usar como equipaje de mano (comprueba si el tamaño de la mochila cumple con lo permitido por la aerolínea con la que vas a viajar) y una mochila de 20/30L para poner debajo de tu asiento. Para algunos destinos, incluso vale un equipaje compacto, como una bolsa de lona o un bolso de viaje.
Si tienes alguna duda, en página de viaje encontrarás indicado cuándo es obligatorio viajar con mochila: léelo en la sección «Mood de viaje».